Estas semanas se ha reanudado las obras del polémico ascensor de Santa Cruz de La Palma, que unirá la actual plaza de La Constitución, junto al edificio de Correos con la zona alta de la ermita de La Luz, que preside el acceso sur de la ciudad.
Recientemente se ha entrado ya en las fases más intensas del proyecto, podemos ver la estructura de hormigón y acero que soportará el ascensor, y en la parte superior, junto a la ermita de La Luz, se ha comenzado a realizar el acceso hacia el ascensor, destruyendo para ello, un fragmento de unos dos metros del antiguo muro defensivo de Santa Cruz de La Palma, uno de los últimos vestigios de las defensas que bajo mandato de Felipe II se hicieron en la capital palmera.
Muro defensivo y atalayas Calcinas y Timibucar
Existe un paréntesis en la historia de La Palma en el que esta se detiene y comienza una nueva etapa.
La isla de La Palma y en especial su capital, fueron saqueadas por corsarios, piratas y moriscos a lo largo de su historia.
Aquellos saqueadores eran en mayor parte antiguos militares de gran prestigio que al ir acabando las guerras debían buscarse un futuro.
Uno de esos piratas fue François Le Clerc "PATA DE PALO" que el 21 de Julio de 1553 arrasó durante 10 días Santa Cruz de La Palma junto a 200 hombres.
François Le Clerc conocido como "Jambe de Bois" Pie de Palo, nace en Reville, Normandía hacia el año 1530. Cursó en la Armada Francesa como capitán y en 1551 fue nombrado Caballero por Enrique II. Fue casado con Marie Rouxel, señora de Crasville y del que solo se le conoce una hija Catherine. En 1549, pierde su pierna izquierda en la batalla de Guernesay (actual Normandía) contra los ingleses y de ahí su apodo.
En 1553, ataca Santa Cruz de La Palma junto a sus lugar tenientes Robert Blondel y Jacques de Sores, este último responsable de dar muerte a los Mártires de Tazacorte, desembarcando en la zona de Las Explanadas.
En 1557 el Rey Felipe II envía al Ingeniero Militar Leonardo Torriani a fortificar las islas Canarias. Uno de los elementos defensivos fue el amurallamiento de toda la ciudad junto a atalayas, asunto que se refleja en Palmaria con gran detalle, llegando de norte a sur y de este a oeste.
En la actualidad, tan solo el muro de la ermita de La Luz y un pequeño testigo en Timibucar reflejan su poder defensivo.
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| Fragmento del "Palmaria" donde se aprecia el muro de la ermita de La Luz. |
Fuente y fragmento del "Palmaria": Fernando Rodríguez Sanchez. Imágen principal: Google.
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