Fantasmas del pasado: La leyenda del arriero Melián y la cruz maldita en La Palma

Fantasmas del pasado: La leyenda del arriero Melián y la cruz maldita en La Palma

Cuenta la leyenda, no documentada, que en la isla de La Palma existió a finales de 1800 un famoso arriero llamado Melián De Las Casas.

Melián, de procedencia peninsular, se abastecía en Santa Cruz de La Palma de productos de alta calidad para luego, recorriendo los antiguos caminos reales, surtir las necesidades de los vecinos de aquellos municipios que visitaba.

Alpargatas, vestidos, calderos, sombreros, aceite o azúcar, café, eran tan solo algunos de los productos más solicitados por sus clientes.

Melián necesitaba debido a esta reputación de varias mulas para el transporte por lo que optaba por contratar ayudantes, pero debido a su fama de avaro ninguno le duraba el suficiente tiempo.

Camino Real de los Puertos, Melián se dirigía hasta el pago de Fuencaliente, sur de la isla, junto a sus dos ayudantes cuando la noche cayó sobre ellos por lo que decidieron pernoctar en una ladera bajo la actual ermita de Santa Cecilia por entonces no existente.

Allí armaron campamento, bajo un gran pino que les protegiera de la escarcha nocturna haciendo fuego para calentar sus cuerpos.Un vecino viendo las llamas se acercó a ellos ofreciéndoles cuanto pudieran necesitar y tras una larga charla terminaron la noche despidiéndose.

Cuando cayó la noche y Melián había sucumbido al cansancio, sus dos ayudantes, hermanos naturales del municipio de Breña Baja, bajo acuerdo hecho con anterioridad, deciden liquidar a su patrón robándole las mulas y la mercancía dejando el cuerpo junto a la hoguera.

A la mañana siguiente, el mismo vecino que les ofreció asistencia la noche anterior observó algo insólito en el lugar donde habían pernoctado los tres hombres y acercándose al lugar descubrió el cadáver de Melián asesinado con su cabeza aplastada por una piedra.

Tras recorrer varios kilómetros dirección Mazo, Fermín al que llamaremos así, denunció tal atrocidad ante las autoridades quienes acudieron al lugar de los hechos de inmediato.

Fermín detalló el aspecto de los dos hombres, pero fue la descripción de las mulas las que hicieron posible dar con los dos criminales pocos kilómetros más allá del lugar de los hechos.

Ambos fueron sentenciados a muerte a horca en el castillo de Santa Catalina.

Unos años después llega a la isla el hermano de Melián, Salvador de Las Casas, conocedor de la fama de su hermano quien se entera de la desdicha por lo que decide instalar en el lugar de los hechos el 17 de junio de 1900 una cruz en memoria de su hermano.

Malián de Las Casas fue enterrado en el cementerio de Santa Cruz de La Palma.

Aún hoy, en el año 2024 los vecinos de este barrio del sur no visitan la zona en noches de luna llena pues comentan que allí abajo, en la zona de la cruz, se escuchan gritos y lamentos y que aquellos que visitan la zona caen en algún maleficio.

La leyenda de la Cruz de Melián
Autor: Fernando Rodríguez Sánchez