El pasado domingo en el “Stadium Gal” de Irún, el CD. Mensajero lograba la primera victoria a domicilio de la temporada. Un triunfo que permite seguir soñando con la consecución del objetivo marcado al comienzo de temporada, la permanencia, a pesar de que hace escasas semanas nuestro equipo era visto como uno de los candidatos a perder la categoría.
Josu Uribe, en entrevista concedida a 7.7 La Palma, reconocía que los tres puntos obtenidos en tierras guipuzcoanas eran de mérito ya que “no pensaba nadie que podíamos hacerlo donde lo hemos hecho… Pero lo conseguimos y creo con justicia, ante un equipo que no había perdido aún en casa, remontando un resultado adverso, poniéndonos 1-3, con una jugada que les mete en el partido en el minuto 85, con dos jugadores menos y a la heroica, después de un descuento de 7 minutos… Los chicos hicieron un trabajo encomiable”.
En la previa al choque el míster rojinegro afirmaba que para ganar en un feudo que se mantenía invicto (hasta el domingo) había que hacer muchas cosas y todas bien. Uribe destacaba que además de eso el equipo le puso “alma e ilusión. El vestuario era una auténtica fiesta porque realmente nos lo merecíamos. En la charla les había dicho que el fútbol estaba siendo injusto con nosotros, en Madrid, ante el Barakaldo… y esta afición, este club y estos chicos se merecían esto, después de un mes de competir con los mejores equipos y haber hecho méritos para ganarles. Y ayer fue como quitarse un peso de encima, demostrándonos a nosotros mismos que somos capaces de ganar en la península y en un sitio donde no lo había hecho nadie. Ese es el camino”.
Jugar el último partido de la jornada conociendo los resultados favorables obtenidos por rivales directos supuso una presión añadida que el grupo supo gestionar: “la comida fue dura, porque sabíamos que Talavera y Rayo Majadahonda habían ganado y en caso de derrota nos hubiéramos puesto a más distancia. Ahora la situación en la clasificacion es distinta, se están metiendo más equipos en la pelea como La Roda, que también tiene que venir a La Palma y estamos muy fuertes”.
Lo que ha demostrado el Mensa en este último mes de competición es que ha sido capaz de medirse a rivales de entidad sin perderles la cara. Esa es otra de las claves a tener en cuenta de cara al objetivo de la salvación, la capacidad de hacer frente a cualquier equipo y en cualquier circunstancia: “Hemos jugado en Madrid y si hubiésemos ganado a nadie lo hubiera sorprendido porque su mejor jugador fue el portero. Y ayer ganamos en casa del tercero con justicia, si bien sufrimos al final porque el árbitro les metió en el partido y además acabamos con 9… Se van dando cuenta de que podemos competir en cualquier campo y que ni Castilla, ni Barakaldo, ni Real Unión nos comen. Nos estamos dejando la vida y será complicado meternos en el descenso”.
Las bajas en forma de lesión o sanción son unas de esas adversidades que tiene que afrontar el equipo casi semana tras semana. Y para el duelo del próximo domingo en el “Silvestre Carrillo” no han dado tregua: “tenemos infinidad de bajas con las expulsiones más las lesiones de Fede y Álvaro, no sé si podre contar con 12 ó 13 futbolistas del primer equipo para afrontarlo. Pero es en casa y lo tenemos que sacar como sea”.
Un duelo ante la SD. Gernika que Uribe define como trascendental. El asturiano manda un mensaje claro a todo el mensajerismo: “desde ya hay que apretar. El partido del domingo es clave porque por primera vez en la temporada vamos a poder sumar 6 puntos consecutivos, porque hay posibilidades de salir del descenso y porque hay que ganar como sea. Está marcado con una equis en el calendario y nuestra gente va a ser muy importante. Entre todos tenemos que meter mucha gente en el Estadio”.
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