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| Científicos concluyen que el agua subterránea en Aridane es de origen meteórico, no marino - Foto de archivo. |
El Centro Nacional Instituto Geológico y Minero de España del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CN IGME-CSIC) y el Consejo Insular de Aguas de La Palma (CIALP) han descartado la existencia de procesos de intrusión marina en el Valle de Aridane, tras los estudios realizados en el marco de un convenio de colaboración científica suscrito en marzo de 2023. Esta afirmación se produce como respuesta a distintas manifestaciones difundidas recientemente en algunos medios de comunicación.
Desde el CN IGME-CSIC se recuerda que este organismo es un centro nacional de investigación y servicios científico-técnicos con más de 175 años de trayectoria, cuya labor se basa en la transparencia, la responsabilidad y el asesoramiento a las administraciones públicas en materia de ciencias y tecnologías de la Tierra. Su único objetivo es mejorar el conocimiento geocientífico de forma rigurosa y con base en datos contrastados.
A raíz de la erupción volcánica del Tajogaite, ocurrida entre septiembre y diciembre de 2021, el CIALP y el CSIC firmaron un convenio para actualizar y mejorar el conocimiento hidrogeológico de la isla de La Palma. Como parte de este acuerdo, se realizaron análisis de la composición hidroquímica e isotópica del agua en los pozos ubicados en los barrancos de Las Angustias y Tenisca, en el Valle de Aridane. Los resultados obtenidos concluyen de forma inequívoca que no existe aporte de agua marina en estos puntos.
En concreto, los estudios realizados por el IGME-CSIC en colaboración con el Instituto Andaluz de Ciencias de la Tierra (IACT-CSIC) han demostrado que los valores isotópicos del hidrógeno y del oxígeno del agua (δ²H y δ¹⁸O) se alinean con la llamada Línea Meteórica Global (LMG), lo que indica que el origen del agua subterránea es meteórico, es decir, procede de la lluvia. Esta señal isotópica es claramente distinta a la del agua marina, lo que permite descartar una posible intrusión de agua del mar.
Además, se han analizado isótopos de otros elementos presentes en disolución, como el carbono inorgánico disuelto (DIC) y el azufre en forma de sulfato (δ³⁴S). En el caso del carbono, los valores de δ¹³C reflejan una importante contribución de CO₂ de origen biogénico, vinculado a la descomposición de materia vegetal del suelo, mientras que los del azufre se corresponden con procesos de alteración de rocas y suelos volcánicos. Ambos parámetros difieren notablemente de los que se esperarían si existiera un aporte marino, reforzando así la interpretación de que el agua subterránea estudiada tiene un origen continental.
En conjunto, los datos isotópicos permiten concluir con claridad que el agua analizada en los pozos del Valle de Aridane es de procedencia meteórica y que no se ha detectado ninguna señal que indique intrusión de agua marina. Así lo han confirmado los especialistas implicados en el estudio.
Por último, tanto el CN IGME-CSIC como el CIALP han señalado que no consideran oportuno responder a ciertas acusaciones difamatorias vertidas recientemente, al entender que buscan desviar la atención y poner en duda la profesionalidad y credibilidad de sus instituciones y del personal científico-técnico que ha participado en estos trabajos. Ambas entidades reiteran su compromiso con el avance del conocimiento científico y se mantienen a disposición de los ciudadanos para ofrecer información veraz y accesible a través de sus canales institucionales.
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