Artista canario Tomaso Hernández presenta "Recuerda, Morirás" Land Art en Ávila

Artista canario Tomaso Hernández presenta "Recuerda, Morirás" Land Art en Ávila

El artista canario Tomaso Hernández presenta en Ávila su nueva instalación de Land Art, titulada "Recuerda, Morirás", en el Centro de Arte y Naturaleza de Hoyocasero, ubicado en el Cerro Gallinero. Este espacio natural es reconocido en el ámbito del arte contemporáneo por su diálogo directo con el paisaje, habiendo acogido obras de figuras clave del Land Art nacional e internacional.

"Recuerda, Morirás" se inscribe en este contexto como una gran instalación *site-specific* creada por Hernández, artista multidisciplinar con trayectoria centrada en la integración paisajística y ecológica. La obra se guía por el concepto "Lo Espectacular de la Sencillez", acuñado por el propio artista, y propone un "ecosistema mixto" abierto a la percepción, la emoción y la experiencia sensorial.

El título, según explica Hernández, "no es una amenaza, sino una llamada de atención sobre el cuidado de la Naturaleza mientras estás vivo". La pieza, concebida tras varias visitas al lugar, se instala en la parte más alta del cerro y se articula como un gran círculo de piedra granítica de 25 metros de diámetro, adaptado al relieve natural del terreno, evocando un campanario abierto al cielo.

La instalación se compone de trece troncos de pino de ocho y nueve metros de largo. Doce de ellos, dispuestos radialmente e inclinados hacia el exterior, forman un círculo de veinticinco metros de diámetro inspirado en los antiguos *tagorores* canarios. Estos troncos se apoyan sobre piedras de granito preexistentes en el lugar, en un gesto de convivencia con el entorno. En los extremos superiores de estos troncos se encuentran campanas de viento, cencerros o esquilas, recogidos de diversos contextos rurales, industriales o rituales, que suenan al activarse con el aire. Estos doce troncos están orientados a los vientos predominantes, permitiendo un diálogo sonoro dinámico. El tronco decimotercero, de diez metros, se alza verticalmente en el centro como eje axial, gnomon o estela solar.

El conjunto remite a calendarios cósmicos, relojes solares y antiguos círculos de piedra, donde el tiempo se mide en luz, sombra y transformación, y las campanas llaman a la conciencia, a detenerse y a mirar lo esencial. El artista describe "Recuerda, Morirás" no como una obra para mirar, sino para habitar, donde la Naturaleza es cómplice y el tiempo es materia.

Hernández subraya que no quiso hacer una pieza sobre la muerte, sino sobre la vida, que se vuelve más intensa al recordar su finitud. La obra despierta una conciencia urgente de vivir y cuidar la Naturaleza mientras se está vivo. La instalación se rige por el ritmo solar, proyectando su sombra como un reloj natural, y las campanas, movidas por el viento, recuperan su carga simbólica ancestral de llamada, advertencia y recogimiento, convocando a la introspección. La pieza se alinea con los puntos cardinales, recogiendo influencias de equinoccios y movimientos solares y lunares.

"Recuerda, Morirás" es una propuesta de Land Art que surge de la contemplación profunda del paisaje y la espiritualidad, planteada como una experiencia inmersiva en la cima del cerro, concebida como un punto energético. Es la primera pieza de la nueva serie "Metamorfosis Silente". El artista palmero insiste en recordar que somos finitud, tránsito y que estamos llamados a proteger lo que nos sostiene. La instalación es un homenaje al tiempo lento y a la conciencia expandida, donde "Vivir con conciencia es el verdadero homenaje a la Naturaleza que nos sostiene".